Una Hernia Cervical sintomática puede generar dolor en distintas regiones que van a depender de la zona de ubicación de la hernia. Continua leyendo y conoce los síntomas, causas, diagnóstico de la Hernia de Disco Cervical y como desde FisioClinics Vitoria te ayudamos con las mejoras técnicas y herramientas terapéuticas para la solución de esta afección.
¿Qué es la Hernia de Disco Cervical?
La columna cervical es la columna vertebral más alta. Consta de 7 vértebras, interconectadas por discos intervertebrales. El disco intervertebral es una junta plana de forma redonda, ubicada entre dos vértebras adyacentes. El disco intervertebral tiene una estructura compleja. En el centro hay un núcleo pulposo, que tiene propiedades elásticas y sirve como amortiguador para cargas verticales. Alrededor del núcleo hay un anillo fibroso multicapa, que mantiene el núcleo en el centro e impide que las vértebras se muevan entre sí. El anillo fibroso tiene muchas capas y fibras que se intersecan en tres planos. Tal componente anatómico de la columna cervical nos permite realizar una variedad de movimientos del cuello, así como giros e inclinación de la cabeza.
Normalmente, el disco intervertebral está formado por microfibras muy fuertes. Sin embargo, por distintas causas que discutiremos más adelante, que conducen a un debilitamiento del disco cervical y con un aumento de la presión intradiscal que lleva a la rotura del anillo fibroso y la formación de una hernia cervical que puede generar o no dolor en la región.
En algunas personas, una hernia del disco cervical puede causar una compresión de la médula espinal. Esta es una afección más grave en la que algunas posiciones o movimientos en el cuello pueden aumentar el dolor. Los síntomas de la compresión de la médula espinal incluyen alteración de la ejecución de movimiento de miembros superiores, dificultad para ejecutar movimientos precisos de las manos, entumecimiento y hormigueo.
¿Cuáles son los síntomas de una Hernia Discal Cervical?
Los principales síntomas de una hernia del disco intervertebral en el área cervical son dolor que se manifiesta en el hombro o el brazo, episodios regulares de mareos, aumento de la presión y entumecimiento de las extremidades superiores, especialmente los dedos. Para hacer un diagnóstico preciso, es necesario obtener imágenes de resonancia magnética; este es, con mucho, el método más preciso para detectar una hernia de un disco intervertebral.
Debe entenderse que los síntomas pueden variar en cada caso particular y dependen en gran medida de la dirección en que sobresale la hernia (parte delantera, trasera, lateral). En su mayor parte, esto afecta la severidad de los síntomas somáticos.
¿Qué causa la Hernia Discal Cervical?
Una Hernia Discal Cervical puede ser causada por un debilitamiento del anillo de tejido conectivo debido a la edad y el estrés y, por lo tanto, permitiendo un desplazamiento del núcleo blando. Los posibles factores causales que podemos destacar son:
- Falla o sobrecarga de la columna vertebral.
- Debilidad congénita del tejido conectivo en combinación con sobrecarga espinal (por ejemplo, durante el embarazo).
- Accidentes como una caída o un accidente de tráfico también pueden provocar una hernia discal, pero es poco frecuente.
- Sobrepeso.
- Levantamiento incorrecto o crónico de cargas pesadas.
- El proceso de envejecimiento y el desgaste de los cuerpos vertebrales.
¿Cómo se realiza el diagnóstico médico de una Hernia Discal Cervical?
Existen varios métodos para el diagnóstico médico de una Hernia Discal, posterior a una evaluación física y palmatoria se procede a otros estudios para confirmar la lesión en el disco intervertebral, estudios como la RM (resonancia magnética) y la tomografía computarizada (TC) son formas muy populares y efectivas para diagnosticar las hernias cervicales. La ventaja es que estas técnicas no son invasivas y requieren que el paciente simplemente se acueste en una mesa de exploración.
Se puede solicitar otra prueba conocida como EMG (electromiografía) para la cual, cuando se describe, suena como algo fuera de la ciencia ficción. Las agujas se insertan en los músculos de los brazos y las piernas, y al estimular nervios específicos, el médico o técnico puede determinar si los músculos están inervados o no. Lo mejor de una EMG, aunque puede considerarse muy invasiva, es que puede descartar cualquier falso positivo como el túnel carpiano, el síndrome, el atrapamiento del nervio cubital y otras afecciones similares.